Las acciones de SharpLink Gaming (SBET), empresa de apuestas, se hundieron un 70% tras anunciar su intención de comprar ether (ETH), criptomoneda de Ethereum, para establecer una tesorería basada en el activo digital.
En su formulario S-3ASR, SharpLink notificó la posible reventa de 58,7 millones de acciones ordinarias emitidas a más de 100 inversores en una oferta privada en capital público (PIPE), un mecanismo que permite vender acciones a inversores acreditados en acuerdos privados.
La caída refleja la reacción del mercado ante la declaración, aunque los directivos aseguran que se trata de una mala interpretación.
Joseph Lubin, director ejecutivo de ConsenSys y presidente de SharpLink, salió al paso para aclarar la situación. En un comunicado, explicó que la presentación S-3 es un trámite estándar tras una operación PIPE y no implica ventas inmediatas de acciones.
“La columna ‘Acciones poseídas después de la oferta’ es hipotética y asume la venta total de las acciones registradas. Ni ConsenSys ni yo hemos vendido ninguna acción”, afirmó Lubin, subrayando que el mercado malinterpretó el propósito del documento.
Mientras tanto, SharpLink se prepara para una operación significativa: la adquisición de ether, como parte de una estrategia de tesorería centrada en activos digitales. Esta movida busca fortalecer la posición financiera de la compañía en un entorno de creciente adopción de criptomonedas, como lo han hecho otras empresas en las últimas semanas, tal como lo reportó KriptoNoticias.
La compra de ETH forma parte de una estrategia de tesorería, diseñada para posicionar a SharpLink en el creciente mercado de criptomonedas. Sin embargo, la reacción del mercado sugiere escepticismo ante esta apuesta por el activo digital.
A principios de este mes, SharpLink recaudó 450 millones de dólares mediante una ronda de financiación privada (PIPE), con la participación de ConsenSys, Galaxy y Pantera Capital. Estos recursos financian la adquisición de ETH y otros planes de expansión, aunque la fuerte caída bursátil refleja los retos de alinear esta visión con la confianza de los inversores.